jueves, 3 de diciembre de 2015

Te doy mi cien por cien.

 Tus manos entrelazando las mías, con fuerza, diciendo que ojalá no eche a correr sin ellas. 
Los lunares que yo no me llego a ver. 
Tu boca gritando a versos que mi espalda y sus cicatrices 
son preciosas. 
Tu risa contagiosa asegurándome que nuestros días serán perfectos.
Mi yo sin maquillaje, 
en todos los sentidos, sintiéndose cómoda en libertad. 
Mi libertad compartida. 
Tus: "Te quiero". Mis respuestas. 
Y me falta el descubrir cómo seguir describiendo nuestro bendito caos. 
Y me faltará tiempo para seguir dándote mi cien por cien.

martes, 14 de julio de 2015

You.

Pasado no cumple su función. 
Se creerá que es futuro o algo.
Y yo estoy harta de su roce en mi nuca y de sus promesas no cumplidas. 
De su escalofrío no existente y de sus ojos color esperanza con mirada infinita.
De sus manos mentirosas y de sus labios con "Para siempre" desgastado.
Y sobre todo: de su inspiración egocéntrica.
Así que déjame en paz, coño.

domingo, 24 de mayo de 2015

Llámalo como quieras.

Me gustan las caricias que me quitan las lágrimas sin darse cuenta.
La poesía en cualquiera de sus formas. 
El maldito café acompañado de lluvia con sentimientos a ti, (P)asado sin resolver.
Llenar la casa de inciensos y colgar mis pies en el cielo.
Ver el amanecer sola o contigo. Esto es opcional. Siempre pensé que el Sol se pone muy tímido cuando sale, y no quisiera ser la culpable de que se sonroje más de la cuenta.
Me gusta pasear en la noche sintiendo el frío helado en mi cara.
Me gustan las pipas, el césped y la playa, pero únicamente, cuando estás observando el atardecer conmigo. 
Me gustan los besos cuando vienen de ti.
Me gusta que me abracen mientras duermo si se trata de ti.
Tu cara sonriente y quitarte el pelo de la cara... Si vieras lo guapo que te veo cuando te vence el sueño en tu intento por mantener mi insomnio. En ese momento, disfruto observando todas y cada una de tus facciones.
Me gusta despertarme contigo. Me gustan los verbos que conjugamos juntos.
En definitiva, me gustas tú. Y no creo que la palabra sepa lo mucho que me paso de la línea cuando digo eso.
Me gusta mi rutina desde que te colaste, maleducado, en ella.
Me gusta como se ve mi vida contigo. (F)


domingo, 19 de abril de 2015

Bendita locura la nuestra.

Se me corrió el rojo carmesí de los labios, empapados de un poco de sangre por tu hambre.
Caníbales de amor.
Siempre nosotros. Egoístas. Crueles. Riéndonos de nuestro desastre.

Siendo tu puta. Siendo mi muso. 
A la vista de todos, parece que echamos a perder nuestra vida.
Y me pregunto cómo voy a perderme si cada vez que te miro encuentro el norte en tu mirada.

jueves, 9 de abril de 2015

Todavía queda vacío por resolver

Podría jugar a las mentiras.
Hoy es catorce de noviembre. Hace mucho frío y estoy sola en casa. La tetera lleva dos minutos y suena Arctic Monkeys de fondo.
Podría sentarme y seguir leyendo un libro. Y de pronto... que suene el timbre. Abrir la puerta y que ahí estés tú, impasible y con mirada segura.
Sorprendida, invitarte a un té con el agua ya hirviendo. Nos sentamos y platicamos como si nada. Todo risas con el hielo a medio romper.
Podría sacar valor e invitarte al sofá para ver una película.
Podrías decirme que sí.
Y entonces me acurruco a ti con el frío de excusa, "El té no me es suficiente".
Y tú, conociéndome de sobra y viéndome desnuda más veces que yo misma, me dices que no hacen falta palabras necias. Y yo responderte: Es tu frío el que no quería.
Podrías entonces empezar a jugar con tu dedo haciéndome dibujos en la cadera, y mandar a la mierda a la cobardía, porque la ropa pide a gritos ser echada. Y vuelves a besarme como si no hubiera mañana mientras me llevas a mi cuarto. Podrías mirarlo con nostalgia y decirme que me necesitas, que mi ausencia te trata como un oleaje enfadado y sin piedad.
Y yo lloro y te beso como respuesta.
Podrías desvestirme. Podríamos hacer el amor. Con calma y sin calma. Después, observarnos al natural, diciéndote que eres lo más bello que he tenido en mi.
Podríamos reírnos y volver a lo que éramos.
Podría no estar jugando a esto.
Podrías hacerlo realidad.

jueves, 26 de marzo de 2015

Joder.

'No entres en mis sueños que los haces pesadillas'.
No entres en mis sueños que es la única manera de verte 
y no me da la gana volver a una realidad en la que tú ya no existes.
Que te pienso el noventa y cinco por ciento de mi tiempo. 
Es la primera vez que siento que mis sueños reflejan lo que realmente quiero:
VERTE.
Eres mi nudo constante. Mi pasado sin ganas de marchitarse.
Y qué le hago si nunca había visto unos ojos que me observaran con tanto amor.
Que me abrazabas con la mirada y tu olor me transportaba a doscientos lugares que quiero conocer.
Y tus caricias me hacían ganas de quedarme en este mundo de mierda porque eras tú quien lo observaba conmigo. 

Soñé que nos veíamos, y nos preguntábamos mutuamente si nos molestaba estar en el mismo lugar. Te decía que no. Podía sentir en mi sueño mi respiración entrecortada y mi corazón corriendo como si no hubiera mañana.
Te observaba con los ojos chiribitas.
Hablamos. Me confesé.
Extrañaba el sonido de tu voz y tu mirada tan directa que era imposible no pensar que me desnudabas los pensamientos uno a uno.
Echo de menos todo de ti, pero soy consciente de que no nos merecemos. 
Algún día te dejaré en paz, lo prometo.
Mientras tanto déjame seguir reteniéndote entre frase y frase. 
Es lo único que me hace sentir que no estoy loca y que tuve entre mis brazos a la persona que más llegué a querer en mi vida.

martes, 24 de marzo de 2015

Lágrimas dedicadas.

Te extrañé,
y sentí tu recuerdo colgando en la punta de mis pestañas.
Oliste mi tristeza e inundaste mi cara.
Nunca me caracterizó mi fuerza, ni intenté evitar
que te deslizaras como catarata.

jueves, 19 de marzo de 2015

Mi propia mano dispara al alma.


Hoy vuelve a ser una noche a solas.

Una noche de ayuna de pensamientos positivos.

Una noche de odio o vacío. Ya no los diferencio muy bien.

Hoy me dan asco los recuerdos creados. Los sueños echo trizas en mis narices.

Hoy odio números, fechas concretas.

Mis risas dedicadas me parecen extrañas.

Hoy no puedo leer poesía.

Hoy odio atosigarme con Arctic Monkeys.

Hoy no quiero cerrar los ojos porque veo tus manos en mí.

Hoy el tren parece ir marcha atrás. Hoy es un atasco.

Hoy no quiero buscar explicaciones.

Hoy es una noche de volver a soltarlo todo. 

miércoles, 18 de marzo de 2015

Secuelas de ti.




No escribo para no sentir a mi dolor más débil.

No escribo para no sentir mis sentimientos tan humillados.

No escribo para no sentir como se forman goteras en las puntas de mis pestañas.

Para no ver como se agrietan mis labios. Para no ver que todo ha pasado.

Que me suenas a irreal. Un hermoso sueño que simplemente se quedó en eso.

No escribo para no llorar.

No escribo porque así no te recuerdo.

Ahora sólo hay una cosa que me duele.

¿Cómo?

¿Cómo conseguiste olvidarme?

Y no es una queja.

Sólo necesito hacerlo yo también. 

Cuando fuimos.


Pasado es pasado.

Miento.

Pasado sigue siendo mi presente, mi triste presente.

Presente, inconscientemente, sigue mirando de reojo hacia atrás, buscando esperanza o algo parecido a eso.

Mi Presente es idiota. Mi Presente es iluso. Mi Presente es torpe y también desconfiado.

Mi Presente es gilipollas.

Mi Presente no odia a Pasado, sólo está cansado de él.

Pasado le hace daño a Presente y ahora, a este, le cuesta mirar a Futuro. Incluso pasa de él.

Presente odia sentirse así y se siente avergonzada de eso.

Presente es algo orgullosa, pero tiene sentimientos.

Presente usa “Presente, pasado y futuro” de manera incorrecta para evitar ser nombrada “ella”.

Para evitar ser nombrada yo.

martes, 17 de marzo de 2015

Vestida únicamente de ropa.


Te veo y siempre estoy desnuda de alma para abajo.
Rutina de naturalidad. De besos bailando al ritmo del otro.
'Te quieros' sinceros.
Mi puta felicidad sin necesidad de etiqueta.
Cambiaste mi punto del romanticismo. 
"¿Por qué regalar flores que se marchitan y ya están medio muertas?" 
Me regalas eternidad en recuerdos. 
Me secas las lágrimas en forma de risas contagiosas.
Somos nosotros sin ganas de perfección.
Despeinados,
contaminándonos. 
Mandando a la mierda estereotipos.
Somos la mezcla perfecta de un café en mi mano observando como te lías un poco de maría para hablar de cómo el mundo se va a la mierda mientras estallan nuestras carcajadas porque nosotros seguimos en pie. 
Somos nosotros en perfecto/maldito/bendito caos. 
Si no eres el amor de mi vida, te atrapo como pueda.